miércoles, mayo 14, 2008

Parabrisas

El agua lo ha opacado. O el agua y la luz precisa, pero el parabrisas es tan contradictorio como describirlo de un brillo mate. Podemos adivinar que hay ahí fuera y parar. La tormenta nos deja después un rato de lluvia fina (que dicen los politólogos) y luego se va con su música valle abajo, para correr con el río.

No hay comentarios: