sábado, mayo 12, 2007

Cuevas

El intermedio de la cueva, el siglo de la cueva. Entramos para que todo el universo gire a nuestras espaldas mientras nos acurrucamos en nuestra amable mansión de tinieblas y peligros. El reloj sigue su mecánico paso, pero la duración, amigo mío, ya sabe usted que la retomaremos a la salida. (Así controlemos cuidadosamente las raciones de luz, de aire, de la ajena impaciencia de los de fuera.)

No hay comentarios: