domingo, abril 29, 2007

Y cuesta abajo

Cuesta abajo el engaño se hace a los pies o por los pies, que comprueban con aprensión que no habían previsto tamaña aceleración, con el sufrimiento consiguiente para rodillas y tobillos. En cuanto a la segunda derivada, que decíamos ayer, se ha de hablar de una pendiente más suave porque, en caso contrario, nos puede estar esperando un notable tortazo.

No hay comentarios: