Del túnel está el viejo chiste que recuerda que a un túnel sólo se entra hasta su mitad, ni un paso más allá.
Seguramente está en lo cierto el chiste y es la topología del túnel lo que marca su destino como metáfora. Sin embargo, el efecto túnel nos habla de una posibilidad metafórica distinta: el túnel es también atajo y cápsula. Es atajo y lo ha sido pero no necesariamente (o necesariamente en un sentido absoluto) pues, en correcta ingeniería, no siempre el túnel lo es respecto a un camino ya trazado. El túnel puede hacer posible lo imposible, por caro. Es cápsula porque muchas veces no importa qué pasa dentro del túnel. Sabemos que ha entrado por un lado y que saldrá por el otro. También es posible que salga por el que entró, que no salga o que el túnel sea una y griega.
Seguramente está en lo cierto el chiste y es la topología del túnel lo que marca su destino como metáfora. Sin embargo, el efecto túnel nos habla de una posibilidad metafórica distinta: el túnel es también atajo y cápsula. Es atajo y lo ha sido pero no necesariamente (o necesariamente en un sentido absoluto) pues, en correcta ingeniería, no siempre el túnel lo es respecto a un camino ya trazado. El túnel puede hacer posible lo imposible, por caro. Es cápsula porque muchas veces no importa qué pasa dentro del túnel. Sabemos que ha entrado por un lado y que saldrá por el otro. También es posible que salga por el que entró, que no salga o que el túnel sea una y griega.
1 comentario:
No he entendido nada :o
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