¿Y qué decir de esta vieja compañera que nunca conocimos en nuestra mano? ¿Y de cuando la movemos hacia fuera, empecinados en acabar con hierbas que crecen vecinas a muros y bordillos?
Recuerdo la zoqueta, que rimaba puntiaguda con la hoz y que se me hacía incomprensible en el mundo incauto del niño que era yo según las últimas estadísticas. Recuerdo que no sabía que se llamaba zoqueta y que la cebada no valía mucho.
Ahora la hoz es un recurso estético y estéril del jardinero, por no dejarla allí tirada explicaremos, y la zoqueta desapareció de la casa, como la cebada, la trilladora pintada de rosa y la verdura pintada de amarillo agosto de las eras. Ahí se queda, la amolaremos bien para el próximo junio.
Recuerdo la zoqueta, que rimaba puntiaguda con la hoz y que se me hacía incomprensible en el mundo incauto del niño que era yo según las últimas estadísticas. Recuerdo que no sabía que se llamaba zoqueta y que la cebada no valía mucho.
Ahora la hoz es un recurso estético y estéril del jardinero, por no dejarla allí tirada explicaremos, y la zoqueta desapareció de la casa, como la cebada, la trilladora pintada de rosa y la verdura pintada de amarillo agosto de las eras. Ahí se queda, la amolaremos bien para el próximo junio.